Por Mariana Lazos, Líder de Proyectos y Operaciones en PIT Policy Lab
En 2005, Estonia implementó por primera vez un sistema de votación por Internet que permitió a la ciudadanía depositar sus votos a través de una computadora conectada a internet desde su ubicación, cualquiera que fuera, sin tener que desplazarse a un centro de votación. Aproximadamente el 2% de las personas votantes utilizaron el sistema para emitir su voto. Para 2021, año en el que Estonia celebró elecciones locales y utilizó este método de votación por novena vez, el 46.7% de los votos recibidos se emitieron en línea. Además, el sistema posibilitó recibir los votos de personas estonias que se encontraban fuera del país, quienes participaron desde 100 países distintos. Se estima que, gracias a esta iniciativa, la ciudadanía se ha ahorrado 11,000 días laborales al no tener que acudir a los centros de votación (Banco Interamericano de Desarrollo, 2019).
Este es tan solo uno de los servicios digitales que Estonia, un país que ha digitalizado el 99% de sus servicios gubernamentales (Banco Interamericano de Desarrollo, 2019), ofrece y que nos brinda pistas del potencial de la transformación digital de los gobiernos como vía para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía, impulsar el desarrollo económico y promover la sostenibilidad de los territorios.
La transformación digital desde los gobiernos va más allá del despliegue de infraestructura de telecomunicaciones o de la creación de una app o de una página web. Tiene que ver con un cambio de mentalidad y de modelo para aprovechar las Tecnologías de la Información y de la Comunicación que debe ir acompañado de una cultura de innovación con una estrategia definida y una estructura organizacional que la posibilite, en línea con los principios de políticas centradas en las personas usuarias, perspectiva de género, accesibilidad e inclusión, búsqueda de la reducción de la brecha digital y el Uso Responsable de la Tecnología.
Desde Latinoamérica, así como hay importantes retos que afrontar, también hay grandes logros que reconocer. Por ejemplo, para 2019, el 73% de los países de América Latina y El Caribe contaban con una estrategia de gobierno digital (Banco Interamericano de Desarrollo, 2019). Por otra parte, se calcula que el 76% de la población de esta región usa internet (Banco Mundial, 2021). El panorama actual nos presenta múltiples oportunidades para ser exploradas y aprovechadas, así como para profundizar y consolidar la agenda de transformación digital.
Particularmente, en México, el Centro México Digital construyó el Índice de Desarrollo Digital, ejercicio que muestra el estado de la digitalización en las 32 entidades federativas. Como pilares contempla la infraestructura, la digitalización de las personas y la sociedad y la innovación y adopción tecnológica en las empresas. El Índice encontró que los estados con menor rezago social resultaron ser los estados con mayor digitalización (Baja California Sur, la Ciudad de México, Nuevo León y Querétaro), mientras que aquellos con mayor rezago social coinciden con los de menor digitalización (Guerrero, Oaxaca y Chiapas) (Centro México Digital, 2022).
Sin duda, los retos para avanzar la transformación digital en nuestro país son muchos. Uno de ellos es el panorama dispar y diverso en cuanto a estructuras organizacionales, procesos internos, recursos de todo tipo y regulación y legislación no armonizada entre gobiernos de los estados y municipios. Desafíos grandes requieren de soluciones de igual tamaño: nos encontramos ante la oportunidad de realizar esfuerzos focalizados e integrales que consideren las características y necesidades de cada territorio para impulsar el aprovechamiento de las tecnologías digitales para el bien común.
Para abonar a ello, desde PIT Policy Lab colaboramos con la Embajada Británica en México para impulsar el programa Transformación Digital: desarrollo municipal basado en tecnología para la capacitación y adopción de mejores prácticas y estrategias en digitalización, nuevas tecnologías, GovTech y ciberseguridad para gobiernos municipales de México y resaltar las experiencias, estándares y prioridades del Reino Unido.
Durante el programa, tuvimos la oportunidad de trabajar con gobiernos municipales, representantes de gobiernos y de instituciones federales, miembros de la sociedad civil, líderes del ecosistema digital, así como con expertos y expertas del Reino Unido en materia de tecnología y datos en pro de la transformación digital de los gobiernos en México.
Como parte del programa se realizaron dos seminarios para 30 gobiernos municipales, una visita de trabajo al Reino Unido en el que participó una delegación de 17 profesionistas, una mesa redonda con 21 personas expertas del ecosistema digital y pronto se publicará la Guía Transformación Digital: Datos y Nuevas Tecnologías, herramienta introductoria al tema para municipios. Las grabaciones y presentaciones de los seminarios, así como otros recursos de utilidad del programa se encuentran alojados en el Repositorio Digital para ser consultados por cualquier persona con interés en el diseño, implementación y creación de iniciativas de transformación digital de alcance público.
El proyecto de transformación digital de nuestro país requiere de impulsar estrategias basadas en la realidad de los territorios, apoyadas en alianzas multisectoriales que sumen al gobierno, la academia, la industria, la sociedad civil y a la ciudadanía. ¡Sigamos explorando, aprendiendo y trabajando para lograrlo!